sábado, 21 de noviembre de 2009

Cuando no esté

Cuando no esté
mis grandes defectos
los verás pequeños
mis pequeñas virtudes
parecerán mayores

Cuando no esté
sabrás que aquello
por lo que hoy
somos extraños
era algo tan simple
que no significaba nada

Recordarás mis sonrisas
mis tristezas
mi corduras
y mis locuras

Mi espontaneidad
mi desprendimiento

Pero no habra tiempo
de dar vuelta atrás
porque quien mira su sombra
nunca podrá avanzar

Porque después del ovido
no se debe reencontrar

Porque lo que se espera
es amargura
reintento de componer
algo que sea ha roto
y que no se arreglará jamás

Y mirarás a quien te acompañe
y buscarás semejanzas
que no encontrarás

Tal vez con alguien más será mejor
pero dos realidades nunca
se parecerán

y aunque encuentres en otra
alguna especie de felicidad
con nostalgia, me has de recordar
porque a lo que hemos vivido
nada se podrá comparar

martes, 3 de noviembre de 2009

Vivir

"Quien no ha amado apasionadamente ignora la mitad más bella de la vida."
Stendhal

"El sentido de la vida está en vivir cada día tal como se nos presenta."
* Anthony Hopkins, actor británico.

"Quien se manifiesta indiferente ante la vida y la muerte es que no ama".
San Agustín

"Vivir no es sólo existir,
sino existir y crear,
saber gozar y sufrir
y no dormir sin soñar.
Descansar, es empezar a morir"
Gregorio Marañón

¿Me preguntas por qué compro arroz y flores?
Compro arroz para vivir y
flores para tener algo por lo que vivir.
Confucio

Hay dos maneras de vivir su vida: una como si nada
es un milagro, la otra es como si todo es un milagro.
Albert Einstein

domingo, 1 de noviembre de 2009

Esas pequeñas cosas

Hoy se me hacía difícil levantarme de la cama, me sentía con mucho sueño aún, pero tenía que ponerme en acción para unos compromisos que tenía en la mañana.

Me dispuse a preparar el café y mientras lo dejaba puesto en la estufa, fui a regar las plantas de mi balcón. Escuchaba el cantar de algunas aves que siempres se trasladan de un lugar a otro a esa hora, en esta ocasión lo escuche con cierta indiferencia. La mañana estaba preciosa, pero no me dí cuenta.

Hay entre mis plantas dos orquídeas, son de mis favoritas. Cuando las iba a regar, sorpresa! Una de ellas estaba florecida con una flor abierta y dos capullos. Sentí muchísima alegría, sobre todo por la sorpresa, ya extrañamente no había observado el proceso de nacimiento de la flor. Me puse eufórica de la alegría.

Son esas pequeñas cosas las que nos hacen la vida diferente. Como dice un correo que circula en internet, Dios todo los días intenta alegrarnos con muchísimos regalos que no percibimos, ya que estamos tan inmersos en nuestras ocupaciones y compromisos, que no prestamos atención a esos detalles que te hacen la vida diferente.

Disfrutemos del sol que calienta nuestra piel, la brisa que alborota el cabello, el cielo despejado, o la lluvia que cae. Todo ello tiene un encanto especial, si lo sabemos apreciar.